Lo de Basanta ya lo había casi confirmado el propio DT en la conferencia de prensa post triunfo agónica ante Suiza y radica en la suspensión por doble amarilla de Marcos Rojo.
El jugador del Monterrey de México y pretendido por la Fiorentina de Italia realizó un trabajo específico de 15 minutos bajo la atenta mirada de Sabella.
Basanta se plantó a defender mano a mano a Augusto Fernández por la banda izquierda, mientras el entrenador lo acomodaba y le realizaba correcciones.
Además, Sabella llamó a Ezequiel Garay y Lucas Biglia para que rabajen la salida desde el fondo. El marcador central recibía el balón y buscaba al mediocampista de la Lazio de Italia, quien buscaba distintos sectores para mostrar la línea de pase.
Si bien es cierto que Fernando Gago es uno de los jugadores que más cansancio sufrió en la acumulación de partido por la inactividad que tuvo justo antes del Mundial, también es una realidad que en la consideración del DT es pieza fundamental delequipo, sobre todo en el armado.
Entonces, en un cuarto de final de un Mundial y con un rival peligroso como Bélgica, resulta difícil pensar que Sabella lo cuide por cansancio.
Otra variante es que, sabiendo que Bélgica es un equipo que utiliza mucho el ancho de la cancha para su ataque directo, el entrenador estime colocar tres mediocampistas centrales con Javier Mascherano, Gago y Biglia, uno de estos dos tirado un poco más sobre la derecha.
De esta forma debería prescindir de un delantero, priorizando, al menos de entrada, la contención de un conjunto europeo que dio muestras de su vocación ofensiva, ganando los cuatro partidos de este Mundial al igual que la Argentina, todos por la mínima diferencia.
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